La dulce venganza de lo dulce

Hay que tomar en cuenta los mecanismos que ocurren en nuestro cerebro cuando comemos alimentos dulces, que en pocas palabras cumplen con la función de ser placenteros y buscar más este tipo de sensaciones tan agradables, sin embargo, se cae en la trampa de buscar algo que termina por causar un daño físico.

Se vuelve imperceptible y de poco a poco nos vemos consumiendo cada vez mas alimentos dulces hasta sentir una imperiosa necesidad de incluirlos en grandes cantidades y más frecuentemente.

Y si lo pensamos más nos pueden conectar a circunstancias o experiencias agradables que aumentan la necesidad de revivir las sensaciones asociadas a lo dulce.

Así que, el cerebro solo cumple su función y aumenta la necesidad de buscar lo dulce, pero esta en cada uno controlar el deseo para disminuir la ingesta de lo dulce de poco a poco y, cambiarlo por construir experiencias dulces en nuestra vida.

Dejar un comentario